La habitaciĂłn era maravillosa (suite superior), con yacuzzi y muy buenas calidades, cama grande y cĂłmoda. La cena menĂș muy rica, en el patio, sĂłlo empañada por unos pĂĄjaros que hacĂan sus necesidades. Con todo un hotel muy cĂłmodo pero debemos mencionar un par de detalles malos que podrĂan mejorar fĂĄcilmente la experiencia. El primero, el personal del restaurante que tras el cierre se quedaron charlando a voces y de risas, bastante molesto desde las doce hasta casi la una de la noche. Lo segundo fue el desayuno, se nos insistiĂł bastante sobre puntualidad. Pagamos un desayuno normal y otro reforzado reservando una hora y pagando por adelantado pero por la mañana tuvimos que esperar mĂĄs de 20 minutos a ser atendidos, se nos sirvieron dos desayunos normales, al indicar que un desayuno era el âreforzadoâ, hubo que esperar mĂĄs, no se nos preguntĂł quĂ© elegir de charcuterĂa, en general se servĂa a medias y no fue la experiencia que esperĂĄbamos (unos amigos nos dijeron que serĂan unos desayunos legendarios y en cambio fueron muy muy mediocres).
En conclusiĂłn, un lugar con cierto encanto pero con un servicio muy inferior al esperado.